'El Hombre Cerilla', una vuelta al cine infantil de los 80

'El Hombre Cerilla' nos traslada a agosto de 1982. Simone -Marco Leonzi- es un niño huérfano de madre que vive con su malhumorado padre -Francesco Pannofino- en una granja italiana. Casi siempre está castigado, lo que no hace sino aumentar sus ganas de aventura y sus ansias de encontrar al hombre cerilla, un ser mítico que según le contaba su madre, puede hacer que se cumplan sus más profundos deseos.


Para encontrar a esta fantástica criatura se vale de su imaginación, sus recuerdos y su inagotable obstinación. Además, cuenta con un curioso grupo de amigos que le ayudarán en esta tarea: Armando Armario, Luz Ciérnaga, Oscar Oscuro, el Tío Disco y Manos Grandes. Lorenza -Greta Castagna-, una coqueta niña que llega al campo para pasar las vacaciones, será la última en unirse a su aventura. 

Simone y Lorenza en el palo-rueda

Sin embargo, Simone tendrá un enemigo que intentará frustar sus planes: el despreciable Rubino, que ayudado de su gallo de pelea, intentará ahuyentar al hombre cerilla. 


Esta película juega con el poder de la imaginación y la creación de un universo paralelo, un realismo mágico en el que los sueños y la realidad se confunden para el protagonista. Y esto, junto con la fotografía, los dibujos animados y el guión, hacen que se parezca mucho al cine infantil de los 80. 

Según Marco Chiarini, su director y guionista, "es una película sobre el abandono. Por eso no es sólo para niños, aunque al ver a un cerdo volando éstos se sientan identificados, el público adulto entiende que va de otra cosa. Simone echa de menos a su madre, vive una especie de luto, intenta lograr algo de cariño y que su padre crea en el hombre cerilla". 


A pesar de todas las broncas y castigos, "el padre no es el enemigo, sino el punto de llegada. Se ve que no es tan malo cuando arregla el muñeco del niño", añadió Chiarini.

En relación al rodaje, el director tuvo que afrontar un importante problema de presupuesto. Empezó a grabar en 2005 y cuando poco después se acabó el dinero, Chiarini editó un libro con acuarelas y dibujos sobre el hombre cerilla. Con lo que recaudó logró financiar el resto de la película, que acabó en 2009. Debido a que en cuatro años los niños crecen mucho y hasta cambian la voz, al final hubo que doblar a los actores y cambiar el sonido de toda la cinta. Para ello se valieron, entre otras cosas, de unos curiosos artilugios artesanales de madera con los que reproducir el sonido de los pájaros.


Esta opera prima de corte fantástico obtuvo dos nominaciones a los Premios David Di Donatello 2010 al Mejor Director Novel y a los Mejores Efectos Visuales. También ha ganado el Premio del Jurado Internacional en el Festival Internacional de Cine Infantil de El Cairo. Ha participado como proyección especial en el Giffoni Film Festival 2011. También ha obtenido los premios a la Mejor Dirección, una Mención Especial a la animación y a la música en el reciente festival griego Olympia for Children and Young People de Pyrgos.


Se estrena el 23 diciembre 2011.